El Ayuno (Ofrenda voluntaria)
El ayuno literalmente significa "abstinencia voluntaria de comer".
En un concepto más amplia se puede decir que el ayuno es disciplina o ejercicio espiritual con propósitos espirituales.
El ayuno debe ir siempre acompañado de oración; tiene en sí mismo un profundo propósito espiritual, ya que transforma toda forma de ser, sentir y pensar.
Para vivir amoldado a los propósitos de Dios, esperando respuestas de acuerdo a Su Voluntad.
Es evidente que el propósito del ayuno no tiene que ver con intentar pagar algo a Dios sacrificando el cuerpo.
El ayuno tampoco es para mostrarse ante los hombres; por el contrario, es algo personal, privado, una ofrenda voluntaria a Dios.
Para ilustrarlo leamos estos pasajes: Isaías 58:3, Daniel 9:3-5.
El ayuno en sí mismo no tiene ningún valor si no va acompañado de oración. Bíblicamente hablando, oración y ayuno son inseparables.
La oración acompañada de ayuno tiene el propósito de que todo el ser esté concentrado en escuchar claramente la voz de Dios, de tal modo que sea posible permanecer en alerta espiritual para que en una situación determinada, La guía, dirección y perfecta voluntad de Dios se manifieste.
Nota: La Oración y el Ayuno son el medio por el cual se mantiene viva la llama de la relación con Dios, aprendiendo a deleitarse en Su Presencia.
Bendiciones en este dia.